HACER ENMIENDAS

Sobre todo, debemos intentar estar completamente seguros de que no lo estamos retrasando porque tenemos miedo.
DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 85
El tener valor, el no tener miedo, son regalos de mi recuperación. Me hace posible pedir ayuda y seguir haciendo mis enmiendas con un sentido de dignidad y humildad. Para hacer enmiendas se requiere cierta cantidad de honestidad que creo que me falta; sin embargo, con la ayuda de Dios y la sabiduría de otros puedo buscar adentro y encontrar la fortaleza para actuar. Mis enmiendas pueden ser o no ser aceptadas, pero después de que están hechas puedo caminar con un sentimiento de libertad y saber que, por hoy, yo soy responsable.
Todas las fechas
- 2025-09-11
Desarrollado por iCagenda